Con el inminente viaje a Londres a la vuelta de la esquina, me empiezan a venir recuerdos de mi misma, hace 20 años, cuando descubrí un estilo de música que me marcaría para siempre: el Brit Pop. Era una tarde de 1995, yo estaba en octavo de EGB y de repente escuché la canción que se convertiría en una especie de himno para mí: Wonderwall de Oasis. Recuerdo quedarme hipnotizada con los primeros acordes de la guitarra de Noel, con la manera de arrastrar las sílabas de Liam en cada estrofa y con la estética de su videoclip. Aunque yo era una enana, en ese momento supe que acababa de descubrir algo muy grande. Aquella tarde de 1995, con solo 13 añitos, me convertí en una incondicional del britpop.
Tengo la suerte de ser la pequeña de cuatro hermanas y a ellas les
debo gran parte de mi educación musical. Gracias a su buena influencia,
fue mucho más rica que la de otros niños; con tan solo 5 años yo ya
memorizaba discos como el Joshua Tree de U2, grababa temas de Depeche Mode en mi walkman o repetía como un loro las letras de David Bowie. Todo eso hace mella, y para mí la música tuvo un papel fundamental en mi desarrollo.
A los pocos días del fenómeno Wonderwall, ya tenía en mi poder de golpe los 5 discos más influyentes de mi vida: Parklife y The Great Escape de Blur por un lado (que acababa de publicarse); y por otro, Definitely Maybe y (What´s the story) Morning glory? de Oasis. En la eterna lucha de las dos bandas, yo siempre fui fan de las dos. Comencé a seguir sus movimientos, a ir a todos sus conciertos y a comprarme revistas en la Fnac como la NME (New Musical Express) o la Q Magazine. Forré todo mi cuarto de fotos, coleccionaba camisetas de la Union Jack, grababa los videoclips en VHS hasta rallarlos... y soñaba cada noche con ir a Londres.
Pero no todo en mi vida eran Blur y Oasis. Gracias a esta especie de fiebre, descubrí otras muchas bandas británicas del rollo indie como Suede, Pulp, Radiohead o Elastica. Eran los años gloriosos del Britpop. Con la muerte del grunge en 1994 (y literal de Kurt Cobain), los ojos ya no estaban puestos en Estados Unidos, sino en lo que se cocía en Inglaterra, y en todas esas bandas de jóvenes de procedencia muy humilde que cumplían su sueño de ser una estrella del rock. Como para no identificarse. La imagen con la que muchos de estos grupos fueron proyectados (algunos como Oasis eran llamados "los nuevos Beatles"), fue tan potente que se creó una identidad propia de la música inglesa. Aunque es cierto que todo está inventado y el Brit Pop no es algo puramente original, por primera vez no se copiaba todo lo que se hacía en América. Algo estaba comenzando a suceder en Inglaterra. El primer paso para el cambio lo dieron los Stones Roses en 1990 con su concierto en la Isla Spike, pero no llegaron a calar tanto y perdieron la oportunidad. O igual falló el marketing. La verdadera rebelión llegó con el tándem Oasis-Blur. Justo en el momento adecuado.
A los medios les vino de perlas este enfrentamiento y no dudaron en echar más leña al fuego tratando de asemejar una lucha a lo "Beatles-Rolling Stones" jamás vista. Todo ese circo mediático llegó a su punto culmen cuando ambos grupos decidieron lanzar el mismo día su nuevo single: Country House de Blur contra Roll with it de Oasis. Era mucho más que el enfrentamiento de dos bandas... los medios lo llevaron mucho más allá. Se convirtió en la guerra entre la clase media de Londres (Blur), contra los rebeldes y de clase obrera de Manchester (Oasis).
Recuerdo todo el revuelo que se montó y finalmente las ventas demostraron que (What´s the story) Mornign Glory? es uno de los mejores discos de la historia. Y los que temas de Oasis están en mi top list de las 10 canciones del britpop que han marcado mi vida:
1. Wonderwall: sin duda uno de los himnos oficiales de toda la generación britpop.
2. Don´t look back in anger: esta canción me pone los pelos de punta y si se estuviera registrado en alguna parte, se vería que es una de las canciones que más ha sonado en la historia de mi walkman/discman/ipod.
3. Girls & Boys: por divertida, inteligente, pegadiza y muy frívola. Además... ¿quién podría resistirse a la sonrisa de niño bueno de Damon y al flequillo sobre la cara de Alex James?
4. Parklife: la canción que definió una época, con una introduccción surrealista del protagonista de Quadrophenia.
5. Live Forever: porque escuchar a Liam cantar "Maybe I don´t really want to know how your garden grows, cause I just want to fly" pasará a los anales de la historia de la música británica.
6. Common People: elegida hace poco como la mejor canción britpop por la revista Rolling Stone (y Jarvis Cocker el tío más guai del planeta).
7. The Universal: en su momento podría resultar un tanto pretenciosa, pero hoy en día es un clásico. Su videoclip es un homenaje a la película de Kubrick "La Naranja Mecánica". Y Damon está súper sexy.
8. Champagne Supernova: la canción que hizo llorar a Paul Arthurs, el otro guitarrista de Oasis, cuando Noel la tocó por primera vez para la banda. Una de las baladas más emblemáticas del grupo, aunque pocos sepan de qué narices va la letra.
9. Beautiful Ones: Brett Anderson irradiando sensualidad por los poros de su piel.
10. Bittersweet Symphony: un auténtico temazo y un videoclip que todos alguna hemos querido imitar.
Hay un documental genial que explica muy bien el fenómeno y se llama "Live Forever, The Rise and Fall Of BritPop". Os dejo con un cachito, el resto lo podéis ver en youtube.
Ya queda menos para Londres :)
A los pocos días del fenómeno Wonderwall, ya tenía en mi poder de golpe los 5 discos más influyentes de mi vida: Parklife y The Great Escape de Blur por un lado (que acababa de publicarse); y por otro, Definitely Maybe y (What´s the story) Morning glory? de Oasis. En la eterna lucha de las dos bandas, yo siempre fui fan de las dos. Comencé a seguir sus movimientos, a ir a todos sus conciertos y a comprarme revistas en la Fnac como la NME (New Musical Express) o la Q Magazine. Forré todo mi cuarto de fotos, coleccionaba camisetas de la Union Jack, grababa los videoclips en VHS hasta rallarlos... y soñaba cada noche con ir a Londres.
Recuerdo todo el revuelo que se montó y finalmente las ventas demostraron que (What´s the story) Mornign Glory? es uno de los mejores discos de la historia. Y los que temas de Oasis están en mi top list de las 10 canciones del britpop que han marcado mi vida:
1. Wonderwall: sin duda uno de los himnos oficiales de toda la generación britpop.
2. Don´t look back in anger: esta canción me pone los pelos de punta y si se estuviera registrado en alguna parte, se vería que es una de las canciones que más ha sonado en la historia de mi walkman/discman/ipod.
3. Girls & Boys: por divertida, inteligente, pegadiza y muy frívola. Además... ¿quién podría resistirse a la sonrisa de niño bueno de Damon y al flequillo sobre la cara de Alex James?
4. Parklife: la canción que definió una época, con una introduccción surrealista del protagonista de Quadrophenia.
5. Live Forever: porque escuchar a Liam cantar "Maybe I don´t really want to know how your garden grows, cause I just want to fly" pasará a los anales de la historia de la música británica.
6. Common People: elegida hace poco como la mejor canción britpop por la revista Rolling Stone (y Jarvis Cocker el tío más guai del planeta).
7. The Universal: en su momento podría resultar un tanto pretenciosa, pero hoy en día es un clásico. Su videoclip es un homenaje a la película de Kubrick "La Naranja Mecánica". Y Damon está súper sexy.
8. Champagne Supernova: la canción que hizo llorar a Paul Arthurs, el otro guitarrista de Oasis, cuando Noel la tocó por primera vez para la banda. Una de las baladas más emblemáticas del grupo, aunque pocos sepan de qué narices va la letra.
9. Beautiful Ones: Brett Anderson irradiando sensualidad por los poros de su piel.
10. Bittersweet Symphony: un auténtico temazo y un videoclip que todos alguna hemos querido imitar.
¿Qué significado tuvo para vosotros el Britpop?
Hay un documental genial que explica muy bien el fenómeno y se llama "Live Forever, The Rise and Fall Of BritPop". Os dejo con un cachito, el resto lo podéis ver en youtube.
Ya queda menos para Londres :)
1 comentario:
Yo era más de Blur, pero ese Wonderwall lo escuché hasta la saciedad... A disfrutar Londres!
Un saludo
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