2 de octubre de 2015

Por el Bulevar en Berlín

¡Cómo son las cosas! La semana pasada estaba subida a una bici holandesa con freno contrapedal recorriendo las calles de Berlín... (suspiro). Era una de las capitales europeas que nos faltaba por conocer y me alegro mucho de haberla visitado. La palabra que más repito cuando me preguntan es... agradable. Pero es muchas cosas más. Berlín es tranquila, moderna, cómoda, dinámica... pero relajada a la vez. Berlín tiene muchas caras: la histórica, la electrónica, la artística, la bohemia, la de la comida biológica, los litros de cerveza y los kilómetros de carril bici.

Y en cada sitio se percibe esa energía especial de progreso y de cambios. No hace falta decir que Berlín ha sufrido los más duros golpes de la historia reciente. Por eso, paseando por su barrios te das cuenta de que está ante ti un enorme campo experimental: enormes rascacielos de cristal que se juntan edificios aún con marcas de metralla; cafeterías hipsters donde tomar brunch situadas en barrios donde nacieron movimientos contraculturales como el okupa o la música tecno. Berlín es capaz de seguir hacia delante como timón de Europa, pero sin olvidar jamás su pasado.

Berlín te gustará y no dejará indiferente, así que si aún no has estado, ¡tienes que ir!

Allá van las 10 cosas que recomiendo hacer en Berlín:

1. Sube a la cúpula de Sir Norman Foster
Subir a la enorme cúpula de cristal y acero que corona el Parlamento Alemán es toda una experiencia que además puedes disfrutar por el módico precio de... ¡cero! El único requisito es registrarse previamente en la página web de visita al Bundestag y confirmar el día deseado mediante un email. Esta obra se ha convertido en el símbolo de la reunificación alemana y es uno de los puntos de referencia de la ciudad. Ofrece una vista de 360 grados, además de los propios debates del Parlamento que ocurren en su interior. Sobrecogedor y sostenible, el proyecto de Foster es favorable al medioambiente: gracias a los espejos situados en su cono invertido, se ilumina de manera natural la zona de debates; y por la noche es al revés, la propia luz del interior se refleja en los espejos iluminando la cúpula. El aire usado es canalizado por dentro del embudo y expulsado al exterior por medio de una abertura en lo alto de la cúpula. ¿Y qué pasa cuando llueve? Pues que ese agua recogida se recicla y sirve para suministrar al propio edificio.


2. Tómate un brunch en Café Anna Blume
Buscando un sitio para tomar brunch en nuestra querida Lonely Planet, dimos con el Café Anna Blume en el precioso barrio de Prenzlauer Berg. Con buen tiempo es perfecto coger una mesita en la terraza y disfrutar de un delicioso desayuno servido en bandeja de tres pisos. Huevos revueltos, salmón, distintos quesos, mantequilla, panes... ¡locura máxima!

 El Cafe Anna Blume está en Kollwitzstraße 83 en Prenzlauer Berg


3. Busca un concierto chulo
Berlín es la ciudad de la música, de los festivales y de los planes nocturnos inesperados. Además, tiene una de las mejores Orquestas Filarmónicas del mundo. En Berlín puede suceder cualquier cosa en muchos de sus clubs. Pero si prefieres algo más organizado busca en la agenda del nuevo Mercedes Benz Arena entradas para ver a tu grupo favorito.

 Nuestro principal motivo para ir a Berlín en septiembre era para verles a ellos. A U2 y su gira Innocence + Experience Tour 2015. Un directo espectacular lleno de guiños y de recuerdos a uno de sus álbumes más memorables - Achtung Baby! - grabado en los estudios Hansa de Berlín.


4. Coge una bici y pedalea
Berlín tiene más de 800km de carril bici y en la mayoría de tramos está integrado en las enormes aceras. Aquí todo el mundo las coge, ¡hasta las familias con niños! Me recordó mucho a Amsterdam. Alquila la tuya por 8 ó 10 euros al día.


 
5. Currywrust, el "fast-food" nacional
En cada esquina encontrarás puestos donde venden esta salchicha cortada en rebanadas con salsa de tomate y curry en polvo, acompañada de patatas fritas (por solo 2,50€). Dicen que los mejores son los del Curry 36 en el barrio de Kreuzberg y que merece la pena la larga espera. Aún así, en cualquier punto turístico al que vayas encontrarás estos puestos con su olor a curry esperándote :)



6. Historia, historia y más historia
De la Guerra, del Nazismo, del Holocausto, de la Guerra Fría y de la Caída del Muro. Berlín ha sido testigo de los acontecimientos más impactantes del siglo pasado. Para saber más y ver fotografías y testimonios de primera mano tienes que visitar estos lugares: Topografía del Terror con la exposición al aire libre que documenta la historia de este espeluznante lugar, sede de las SS; Monumento a los Judíos asesinados en Europa con las más de 2.700 estelas de hormigón obra del arquitecto Peter Eisenman; Berlin Wall Memorial en la histórica calle Bernauer Strasse, es el único lugar donde todavía pueden verse las durísimas medidas de seguridad que separaban el Berlín Este del Berlín Oeste. Conserva más de 200 metros de muro original y cuenta con un museo que te explica toda la historia de la división de Berlín y Alemania desde el día en el que se pusieron las primeras alambradas, el 13 de agosto de 1961.



7. Free tour, imprescindible
Es muy popular entre los españoles reservar uno de los muchos free tours que salen de la Puerta de Brandemburgo. Nosotros cogimos este que hace un recorrido de 3 horas por el Berlín esencial: búnker de Hitler, Checkpoint Charlie, Gendarmenplatz, Bebelplatz... Nuestro guía era sevillano y fue muy majo con el grupo, ¡gracias Hugo!



8. Un retrato vintage de recuerdo
Serán un reclamo para los turistas, pero yo no me pude resistir. Estas auténticas reliquias están en muchas partes de la ciudad. Existe hasta un mapa donde puedes ver dónde están situados. Se han convertido en una atracción turística más. Olvídate de las apps de tu móvil con efectitos retro y sácate unas tiras en el fotomatón por 2 euros. ¡Cuidado porque son adictivos!



9. Zonas verdes
Los berlineses también saben aprovechar su tiempo de descanso con multitud de zonas verdes. El parque más grande e importante es Tiergarten ("el jardín de los animales"), situado en el centro de la ciudad cerca del Reichstag. Recorrerlo en bici es una pasada. Nosotros llegamos hasta el zoo, la Columna de la Victoria y un poco más allá, hasta la iglesia del recuerdo o Kaiser-Wilhelm-Gedächtniskirch.El parque es enorme, ¡el doble que el Hyde Park de Londres!

 En la foto, el parque de Treptower Park con el Monumento de Guerra Soviético donde están enterrados 5.000 soldados soviéticos. Es el mayor cementerio militar soviético de Alemania.


10. Arte al aire libre
No te puedes ir de Berlín sin hacerte una foto con lo poco que queda del muro original en la zona llamada East Side Gallery. Lo han mantenido en pie por el valor artístico que tiene, con pinturas de más de 100 artistas que rinden homenaje a la libertad, la esperanza y que transmiten la importante época de cambio que se vivió en los 90. Los más famosos el coche Trabi atravesando el muro y el beso entre el líder ruso Brezhnev y el presidente de la RDA Honecker.


Berlín ha sido uno de esos viajes que te deja con ganas de volver. Por supuesto no puede faltar una cita con el arte en la Isla de los Museos, y de paso, saludáis a la reina más bella de Egipto, Nefertiri.

¿Conocíais Berlín? Por mi parte ya puedo decir que es bien cierta la famosa frase que hace la famosa: Berlin loves you!

1 comentario:

Carla in Savannah dijo...

Desde que la visité en 2007 se conviritó en mi ciudad europea favorita, por delante de Londres, Roma o París... No lo puedo evitar, me encanta, tiene de todo: historia, cultura, tradición y vanguardia... Me encanta!! Muy buen post :D